Imaz (Repsol) carga contra la normativa medioambiental: «No podrán prohibir el motor de combustión»
El consejero delegado (CEO) de Repsol, Josu Jon Imaz, ha cargado este jueves contra las normativas medioambientales de la Unión Europea y ha asegurado que los políticos no serán capaces de prohibir el motor de combustión en el continente antes de 2035, tal y como prevé Bruselas. Así, el directivo considera que estas restricciones son un «error profundo» y que la total desaparición del vehículo de diésel o gasolina «no se va a producir».
«Es falso el axioma de que electrificar signifique descarbonizar la economía. Los combustibles y gases renovables son una necesidad si de verdad queremos reducir las emisiones», ha defendido en el acto de presentación en Madrid de la Asociación de Combustibles Renovables y Economía Circular para una Movilidad Sostenible (Crecemos).
Así, Imaz sostiene que el «problema» de la contaminación no está en el motor de combustión, sino en la antigüedad del parque automovilístico nacional. «Estamos desaprovechando la tecnología con la que contamos en estos momentos», ha comentado.
Sobre estos supuestos también se ha pronunciado el consejero delegado (CEO) de Logista, Íñigo Meirás, quien no considera «creíble» la erradicación de los motores de combustión en territorio europeo durante la segunda mitad de la década próxima.
«En Europa lo más eficiente sigue siendo el transporte por carretera y, en estos momentos, lo único que descarboniza es hacer menos kilómetros, pero eso no es posible», ha comentado
El CEO de Repsol
Esta no es la primera vez que el CEO de Repsol se pronuncia en esta línea. En mayo, Josu Jon Imaz cargó en la junta general de accionistas contra Greenpeace y algunos activistas que critican a la compañía por no luchar contra el cambio climático.
Preguntado por «cuándo iba a dejar de vender petróleo y gas», el CEO respondió contra los activistas: «Nos están pidiendo que dejemos de producir petróleo y gas y ¿ustedes dicen que son sostenibles, sociales y éticos pidiéndonos eso?, ¿cómo va a llenar este mundo las necesidades de energía que tiene?».
En la misma línea, explicaba el impacto real en emisiones de CO2 de las distintas formas de generar energía: «vamos a seguir produciendo gas y petróleo porque el mundo lo necesita. No es ético cerrar los ojos ante la realidad. ¿Ustedes dicen que son sociales? Si como piden, Europa deja de producir hidrocarburos lo primero que va a pasar es que va a elevar su dependencia, ¿es ético reforzar a Putin y otros regímenes autoritarios?».